Programa 209

"El voto femenino ha sido una
gran ruptura del esquema patriarcal"

En esta emisión, contamos con la participación de Dora Barrancos, Profesora Consulta de la UBA, Investigadora Principal y Directora del Área de Ciencias Sociales y Humanidades del CONICET, para reflexionar sobre género en el marco del sexagésimo octogésimo aniversario de la Ley 13.010 de Voto Femenino.

En relación a las recientes transformaciones en materia de género en la Argentina, Dora planteó que "la sociedad argentina ha dado pasos casi insospechados. Hoy día tenemos en materia legal muchas prerrogativas en materia de equidad que hacen que la Argentina sea el país latinoamericano con mayor cantidad de ellas. El voto femenino ha
sido la segunda gran ruptura del esquema patriarcal; la primera se remonta a 1926 con la reforma del Código Civil. Recordemos que el primer código civil argentino de 1869 sujetaba jurídicamente a la mujer al designio patriarcal del marido; la mujer no podía profesionalizarse, educarse, etc., sin el consentimiento del marido. Con la ley de voto femenino de 1947 se hicieron posible -al menos- estándares de ciudadanía semejantes".

"Voy a recordar que la primera oportunidad de tratamiento legislativo en plenario del voto femenino ocurrió 1932 y que la Cámara de Diputados dio media sanción a la ley. Pero nunca fue tratada en el Senado de la Nación. Por lo tanto, hubo que esperar hasta 1947, momento en el que todas las fuerzas políticas llevaban la consigna del voto femenino. Ello se dio porque estaban los acuerdos de Chapultepec de 1945, en donde las naciones americanas sugerían el derecho al voto. Entonces, hacia 1947 el camino estaba muy regado. Quiero recordar a tres líderes feministas fundamentales del voto: Alicia Moreau, Julieta Lanteri y Elvira Rawson", agregó la invitada.

En cuanto a los desafíos futuros, uno de los puntos que Barrancos señaló es que "los estatutos universitarios tendrían que hacer lugar a los cupos; esto es fundamental. Se trata de una reforma elemental en donde el cupo representaría la paridad. Sería una señal importante de aggiornamiento del Estado en materia de Derechos Humanos. Recientemente, se ha formado una red interuniversitaria dedicada a Género, que va a estar muy atenta para oponerse a toda forma de violencia de género. Sabemos que todavía hay debilidades en la actuación. Por la Ley 26.485, todas las instituciones del Estado están obligadas a ser cooperantes activas en la lucha contra el flagelo de la violencia. En el ámbito estatal, no puede haber violencia; y si la hay, se debe encararla, tratarla y erradicarla".